Explota, explota mi corazón


TAIPEI (Reuters) - Los restos de una ballena en descomposición de 60 toneladas estallaron en una calle concurrida de Taiwán, cubriendo a transeúntes, vehículos y tiendas con restos ensangrentados y cortando el tráfico por varias horas, dijo el jueves la prensa local.El animal muerto, de 17 metros de longitud, era transportado en un camión a una universidad para que se le efectuara una autopsia y, según los expertos, los gases de su descomposición interna causaron su explosión.La ballena había muerto tras quedar varada en la costa suroccidental de la isla de Formosa
Uno
No me imagino la sensación que debe producirse al ver explotar una ballena.

Hasta el día de hoy, conocía ballenas blancas, ballenas majestuosas, ballenas en peligro de extinción, ballenas asesinas incluso. Hoy se agrega un nuevo adjetivo: ballenas explosivas.

Dos
"Y si en ese momento su pecho fuera un arma, Ahab habría disparado su corazón al gran ojo negro de Moby Dick"

El capitan Ahab no era una ballena. Pero sabía de ellas. Las perseguía. De Nantucket a Malasia. De Rio Gallegos a Lima. Cada cetaceo que mataba le recordaba a aquel que no había podido vencer. La gran ballena blanca que le había robado su pierna derecha y las ganas de vivir. Persigue a Moby Dick por los siete mares hasta acorralarla en el pacífico profundo. La ballena que se ha cargado a varios capitanes (y que no piensa explotar, hasta haberse llevado consigo a la humanidad entera), se transforma y muta de acorralada a acorraladora.

Solo se salva Ismael, que sobrevive únicamente para contar la historia.

Definitivamente, una bestia de cuidado.

Tres
Durante siglos la ballena fue el azote de los mares y el hombre su némesis. Hasta que llegó Greenpeace con su marketing del buen tipo, ese que se resume en un pensamiento interesante que podría conceptualizarse como "Yo me cago en los chicos que me piden comida en la calle, miro para otro lado cuando me entero que un amigo esta sin guita, hago como que no hay nadie cuando un cartonero toca mi timbre pero dono 5 pesos mensuales con mi MasterCard a Greenpeace... ahhh que buen tipo que soy".

Repito, llegó grinpís y convirtió al Leviatán de los mares en una simpática caricatura apta para convertir en peluches. Si grinpís se hubiese llamado blacpís, en vez de preocuparse por el hambre en África hubiese diseñado unos simpáticos negritos de peluche. Y la pregunta es la misma de siempre... ¿Podemos ser tan banales?

Cuatro
>Argentina tiene de todo, los cuatro puntos cardinales, los climas más variados, las mejores mujeres y las ballenas más fashion. ¿No vieron que cuando pegan el salto se congelan en el momento justo que su cola emerge de las olas para emular el tipico colgante grinpiseño "save the whales"? Eso no lo conseguis con las ballenas yanquis... ah no, eso es marca registrada de las "Cetaecus argentum", las únicas con autonomía de catorce horas y un valor símbolico suficiente para pagar la deuda externa.

Cinco
Sesenta mil kilos de tripas volaron en Taipei. Si ese no es sintoma suficiente para volver a poner las ballenas en su sitio, ¿Qué hace falta? mi propuesta de solución, es la opción natural. ¿Cómo es eso? Permitir la caza de ballenas, pero en barcos replica del Pequod, nave del Capitan Ahab y su tripulación. En ese momento se había llegado al equilibrio perfecto... a veces ganaba la ballena, a veces los hombres. La técnica de los doscientos años siguientes hizo el resto. Hagamos un rewind y saquemos el back-up de los balleneros de Nantucket.

Van a ver que divertido se pone.

Ah... por cierto, guardenme un lugar en la nave, estoy ansioso de salir con mi arpón en busca de mi gran ballena blanca.
 

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